Madrugada del 29 de Mayo de 2006

Nos tocó fin de semana largo, y por lo tanto esperaba una madrugada con menos asistentes, pero una vez mas nuestra Querida Mater y Nuestro Señor Jesucristo nos llamaron y un buen grupo de Madrugadores estuvo dispuesto a ganarle la pelea a las sábanas y reunirse "para alabar y bendecir, adorar y agradecer".
La lectura, con una profunda metáfora respecto a la barca que transportaba a los apóstoles a Cafarnaúm a través de un mar turbulento, y a Jesús que camina sobre el agua para calmar el miedo de los apóstoles y llevarlos sanos y salvos a su destino, nos hizo reflexionar sobre lo que estamos haciendo (en general muy poco) para hacer presente el mensaje de Cristo resucitado a donde es más difícil, a la vida cotidiana y a nuestra realidad diaria. Tal como dijo EnriqueF., nos sentimos relativamente seguros en la barca, que es la iglesia, pero el Señor nos pide bajarnos de esa barca, y pisar el agua, con la convicción de que nuestra fe y Cristo resucitado nos guiarán a puerto seguro. Queda pendiente el desafío personal de dar a conocer a Cristo a quienes hoy no lo conocen.
Siempre es especial la eucaristía que oficia el Padre Jorge, y por supuesto esta vez no fue la excepción.
Ya terminada la madrugada, el desayuno de rigor, esta vez con multimedia incluida, en la forma de un video que nos compartió Max del relato de un arquitecto colombiano que sufrió la experiencia de ser raptado y allí en una situación límite la presencia del Señor en su misterioso actuar. No la terminé de ver, así que no les puedo contar el final...
Para la posteridad la foto de los asistentes.

La próxima madrugada coincide con el retiro de matrimonios del movimiento Schoenstatt de Valdivia, al que además están invitados los matrimonios de Madrugadores. Surgió la idea entonces de hacer la madrugada en la casa del obispado donde se va a hacer el retiro (Benjamín verá la factibilidad de esto). Queda la invitación abierta.